“EL PRECIO DE LA DESIGUALDAD. El 1% de la población tiene lo que el 99 % necesita.”
TÍTULO ORIGINAL: THE PRICE OF INEQUALITY: HOW TODAY´S DIVIDED SOCIETY ENDANGERS OUR FUTURE.
EDITORIAL: PRISA EDICIONES
ISBN: 978-84-306-0069-4
PÁGINAS: 498
VALORACIÓN: 5 sobre 5.
El economista y premio Nobel Joseph E. Stiglitz es un profeta implicado en el siglo XXI. En este libro describe cómo la actual situación de desigualdad en la riqueza y la pobreza de la sociedad, consecuencia directa de la Gran Recesión (año 2008) y también de situaciones anteriores, es incompatible con un sistema razonable de justicia y democracia.
El libro de Stiglitz, que comento, es la ampliación de un artículo que escribió el autor para la revista “Vanity Fair” y que tituló “Del 1%, por el 1%, para el 1%” parafraseando la expresión: “el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo” del final del discurso de Gettysburg pronunciado en 1863 por el presidente Lincoln.
Básicamente el libro asegura que ni la justicia ni la democracia son compatibles con la gran diferencia existente en la sociedad (realmente se refiere a la americana, aunque asegura que en otras economías desarrolladas puede ser aún peor) entre los muy pocos que tienen mucho y la inmensa mayoría que es desposeída sistemáticamente de los bienes que necesita para vivir.
En resumen, el mensaje del libro es que los políticos diseñan las instituciones y las leyes de forma que solamente unos pocos muy influyentes se ven favorecidos a expensas del trabajo de la mayoría que cada vez se empobrece más. La economía, como ciencia, desempeña un papel demasiado ambiguo en este dilema.
Pero no vamos a sumergirnos en esta idea que precisa rigor y cuyo desarrollo me parece complicado. Hablemos de dos cosas que nos son familiares: los mercados financieros y los bancos centrales (el americano y el europeo).
Los mercados y la desigualdad
Tenemos que desengañarnos ya que los mercados en realidad son construcciones que proceden de las leyes, las normativas y las instituciones y son los políticos quienes fabrican estas influyentes realidades y sus consecuencias distributivas, que favorecen siempre a los mismos.
Los economistas basamos nuestros análisis en el equilibrio entre la oferta y la demanda. Pero estas dos fuerzas sociales han sufrido un colapso debido al gran aumento de la productividad provocado por el uso de las nuevas tecnologías.
Han sido las nuevas tecnologías, unidas al proceso de globalización las que han alterado de manera desproporcionada el mercado laboral.
La libre circulación de capitales y de mano de obra, procesos característicos de la globalización, ha aumentado la eficiencia a favor de las entidades financieras, al manejarse en mercados desregulados y ha perjudicado seriamente el mercado laboral, obligándole a competir por las menores retribuciones de puestos de trabajo no cualificados.
La globalización del comercio también ha influido en contra del mercado del trabajo, al poner a disposición del consumo bienes fabricados en otros países con menores derechos laborales.
Los Bancos Centrales americano y europeo
El Banco Central Europeo solamente tiene como objetivo que la inflación no sea superior al 2%. La Reserva Federal, es decir, el Banco Central del dólar, se fija como meta de su actuación además no superar determinados índices naturales de desempleo, lo que le sitúa con más propiedad en el control de variables antagónicas.
Los banqueros, durante los últimos años, han participado en la religión de la política monetaria. Son ahora los gobiernos los que deben afrontar de forma pragmática el problema del paro y dejarse de escudar en señalar como causa del caos actual la insuficiente demanda total de la economía.
OTRO MUNDO ES POSIBLE.
Tocqueville pensaba que preocuparse por los demás no solamente es bueno para el alma, sino también para los negocios. Significa que prestar atención al interés propio de todo el mundo es una preocupación para el bienestar de uno mismo.
No es tiempo de egoísmos desproporcionados, que desde posiciones de autoridad mal entendida, rompen la cohesión social.
Si tenéis interés en la revista economía crítica hay una reseña del mismo.
2 Comentarios en “COMENTARIO DEL LIBRO DE JOSEPH E. STIGLITZ”
Stiglitz y el tema de la desigualdad a la que hemos llegado mediante la creencia social y económica que hemos denominado «sistema capitalista», son ya dos clásicos en los debates en la red.
Otros libros (como «El informe Lugano») desarrollan esta idea con más o menos acierto.
Dado que hoy en día las pantallas digitales corrigen el engorro de manejar y archivar libros debido a su volumen incompatible con la reducción y aprovechamiento de los espacios, me atrevo a proponer el desarrollo de una idea sobre una biblioteca virtual compartida por los asociados interesados en un determinado tema a base de comentarios y conclusiones sobre los diferentes libros que puedan suscitar interés entre los socios.
El asunto de la desigualdad pudiera ser un tema que aglutine opiniones y comentarios.
Quiero agradecer a los gestores de la web la inclusión del comentario de Aurora López Fogués sobre el libro de Stiglitz. Se trata de un comentario, que no cita las nuevas tecnologías como causas de la necesidad de un nuevo paradigma económico (también político) que se desea. Aurora hace un análisis muy personal de la situación.
Como no quiero entrar en profundidades, relato el comentario de un influyente italiano (Stefano Tamagni) con el que tuve la suerte de reunirme recientemente. Aseguraba el italiano que el modelo actual del pensamiento económico procede de las soluciones que los franciscanos en la baja edad media defendieron para solucionar, sin duda, los graves problemas sociales del pueblo. De hecho preguntó si algún asistente conocía al padre de la contabilidad y enseguida le respondió uno (con la extrañeza de Stefano) el nombre del franciscano (Fra Lucca Pacciolo): un invento sencillo que hoy, manejado por el mayor zopenco, le permite dirigir la vida y sufrimientos de las personas.. De acuerdo con Aurora, pero hay que afilar un poco más el lápiz.